
Estamos en un momento en el que el velo entre lo terrenal y lo espiritual es cada vez más fino y muchas personas empiezan a ver y sentir cosas que les descolocan. Términos como canalizar, resonar, la Fuente, la Luz son cada vez más conocidos. La famosa "Noche Oscura del Alma" de la que tanto se habla, el despertar espiritual... pero ¿qué está ocurriendo en las redes sociales? Desde mi experiencia, se puede hacer una muy buena labor. Aportar lo que uno ya ha aprendido y continuar aprendiendo de otros. Sin embargo, hay un "batiburrillo" que si no estás muy conectado contigo mismo puedes caer en el caos de la confusión y el engaño. Llegando a querer dejar atrás todo lo aprendido. Por hastío y hasta por miedo.
Por un lado tenemos a los estafadores de toda la vida. Desgraciadamente, aunque para muchos de nosotros son muy obvios, diariamente le sacan el dinero y juegan con las emociones y las circunstancias de vida de las personas. Creo que todos hemos caído en algún timo en este "mundo espiritual". Ya sea con algún o alguna tarotista, gente que se hace llamar médium o esos "Maestros" que hacen talleres de todo tipo y al final no aprendes nada y caes en la frustración.
Dentro de los profesionales hay una lucha de egos exacerbada. Siempre digo que el día que volvamos a la Luz nos daremos cuenta de que aquí en la 3D solo hemos conseguido canalizar un 0,0001 de todo lo que veremos y recordaremos allí. Pero mientras tanto, la gente venga hacer talleres para ser duchos en todo. Herramientas sagradas que una vida no basta para dominarlas se acumulan como churros en esos currículums de los perfiles de cualquier red social. "Soy médium, tarotista, Maestro de Registros Akáshicos, de Reiki, hago constelaciones familiares, Péndulo Hebreo, soy astrólogo/a...." Lo siento, pero personalmente no me lo creo. No hay tiempo material para dominar tantas disciplinas.
Luego tenemos a la gente que cree que canaliza. Esto es muy peligroso porque suelen ir dando mensajes que nadie les ha pedido a los demás sin medir las posibles consecuencias de sus palabras. O personas que sí canalizan pero están contactando con el bajo astral y no se están dando cuenta.
Y a todo esto hay que añadir a los que se dedican a hacer trabajos de no luz (lo que vulgarmente llamamos magia negra) a diestro y siniestro. Cortándole los caminos al pobre desgraciado o la pobre desgraciada que no le haya caído en gracia y que no sabe por dónde le vienen los palos. Con los consecuentes aprovechados que les venden un amuleto por 300 euros prometiendo que eso les liberará de todos sus males.
No os asustéis por el pesimismo que desprende este post. Hay muchísima gente muy profesional que se toman este tema muy en serio. Y, humildemente, espero aportar mi granito de arena para ir desenmarañando todo este galimatías que genera tantas dudas y tanto rechazo a un terreno que ya de por sí suele ser motivo de burla.
Al final todo es más sencillo de lo que parece. Cada uno tiene que comenzar su camino de autoconocimiento. Y, a partir de ahí, empieza la conexión con los guías, los Maestros, los seres queridos trascendidos.... Intentaré guiaros pasito a pasito con los conocimientos que tengo hasta ahora. Yo continúo mi propio camino. Espero poder aprender de vosotros y vosotras también.
¡Bienvenidxs a El Refugio del Espíritu!